sábado, 19 de julio de 2008

Una Comedia triste en tiempos de Hitler


















Muchas películas nos hacen reír, muy pocas películas nos hacen llorar; pero casi ninguna película nos hace reír y llorar. “La vida es bella” produjo, en mi, este raro efecto. Es tan divertida, pero a la vez tan triste; una gran película italiana de 1997, dirigida y protagonizada por Roberto Benigni. En verdad, se convierte en un clásico del cine y como dice la película: “Una fábula”; pero no cualquier fábula, una fábula en los peores tiempos de Europa y de toda la humanidad.

Guido, ciudadano judío, protagonizado por Roberto Benigni, busca poner una librería y encuentra, en el intento, al amor de su vida, Dora, protagonizada Nicoletta Braschi, en la ciudad italiana de Arezzo en 1939, en pleno surgimiento y fortalecimiento del fascismo y nazismo. Luego, de divertidas hazañas realizadas por Guido, en mi opinión el hombre más feliz y positivo del mundo, él y Dora se casaron y tuvieron un hijo llamado Giousé, protagonizado por Giorgio Cantarini. Guido logró establecer su librería; sin embargo, la alegría no duró mucho debido al fascismo de la época; Guido y toda su familia son recluidos a un campo de concentración, en el cual, él, tiene que sobrevivir cada día en este lugar, pero sobrevivir haciendo creer a su hijo que se encuentran jugando una especie de juego; en este ambiente, desarrollan un montón de experiencias únicas y Guido, con un esfuerzo sobrehumano, intenta sobrepasar diversas situaciones adversas, siempre con una sonrisa en la cara, para su querido hijo.

Está manera de describir el fascismo, el nazismo y la segunda guerra mundial, difiere mucho de las películas clásicas de soldados, guerra, batallas, aviones, barcos, etc. Se nota el estilo de la película italiana, película europea, muy diferente al estilo clásico de Hollywood. Además de utilizar de manera perfecta los recursos cinematográficos existentes, el tema es muy interesante. "La vida es bella", ganadora de tres premios Oscar, es una gran historia en medio del abuso del poder, en la Italia fascista nazi en tiempos de Hitler y Mussolini. Un película, pero sobre todo una linda, graciosa y triste fábula.

1 comentario:

Erick Guiomar dijo...

He visto la pelicula y, es cierto, es muy buena, una ran pelicula, peliculas asi, elevan el nivel del cine a arte. Y claro ahi está holiwwod, que se puede esperar de holliwood, no se puede pedir peras al olmo, aunque sería mejor analogía, no se le pude pedir comida al ano.... discula la franqueza pero es que relamente holiwwod y televisa, han podrido la mayor cantidad de cerebros de esta generación.


Diseño del artista cusqueño Jorge Flores Najar, mi querido Tío.