“Paro” es definido por la Real Academia Española como la interrupción de actividades colectivas por iniciativa de algún grupo social o de una autoridad. Para mi tiene otro significado. Como es conocido, los últimos acontecimientos ocurridos en el congreso debido a la famosa “Ley de Promoción de Desarrollo Sostenible de Servicios Turísticos en los Bienes Inmuebles Integrantes del Patrimonio Cultural de la Nación” (Ley 29164) ha provocado distintas reacciones desde el mismo pueblo cusqueño hasta nuestras autoridades. Cabe destacar, además, que desde hace unos días el Cusco parece ciudad de policías y soldados.
Al parecer las frases y “el inicio de la lucha” de nuestros gobernantes y autoridades alertó al gobierno central. Es cierto que tanto nuestros representantes en el parlamento, la alcaldesa y el presidente de la región Cusco se expresaron en tono de “lucha” en la sala de conferencias del congreso luego de abandonar la reunión para la derogación de la ley, de la cual salieron perdiendo la votación, pero no es para menos debido a que esta ley no tiene sentido y atenta contra el Cusco. Por lo tanto, como dijo la congresista cusqueña Sumire, mi opinión la comparto con ella: “Si Bruce quiere vender, que venda a su madre”.
Pero en fin, no es la primera vez que el gobierno central es injusto con el interior del país. No pueden esperar que el Cusco se quede quieto mientras lo golpean ¿no? Como decía, en este momento, en la capital histórica del Perú encuentras policías en la puerta de los mercados, debido al paro de mercados; en el aeropuerto, debido a la advertencia de nuestras autoridades; en la estación de San Pedro y en Machu Picchu, también debido a las advertencias; y, por último, en rondas por toda la ciudad, por precaución.
“Habrá huelga” fue la frase de Hugo Gonzáles al salir del congreso. Dicho y hecho, hoy fue día de huelga y de paro “seco”. Sabía que era paro, pero paro ”seco”, obviamente que no. Muchos dijeron que iban a cerrar el agua, pero luego escuché que para nosotros paro “seco” era paro total, recogí la noticia con una sonrisa en la cara, pero bueno, estos días he estado de profesor de matemática y tenía que cumplir mi deber. Así que tomé mi bicicleta y me puse en marcha. No les mentiré, es primera vez que salgo en un paro y mucho más en un paro “seco”, solamente por el temor de mis padres. Ya en ruta, me sorprendió ver un par de carros pasando en un paro “seco”, pero al fin y al cabo, los manifestantes les silbaban y los amenazaban con piedras, las calles tenían “piquetes” y muchos caminaban o jugaban fútbol en plena pista; por otro lado, también se observaban muchas bicicletas. Además, los policías no faltaron.
Ya dando mis clases de matemática se escucharon ambulancias pasando y, luego del rico almuerzo que me invitaron en casa de una alumna, escuché por la radio, con una cara de seriedad, que, por precaución, cerraron indefinidamente el aeropuerto del Cusco, suspendiendo catorce vuelos provenientes de Lima y, además, habían detenido a unos seis estudiantes tratando de entrar al aeropuerto Alejandro Velasco Astete por una pared en la vía expresa. Y pensé para mí, los policías ¿tenían que hacer algo?, pues lo lograron.
Al parecer las frases y “el inicio de la lucha” de nuestros gobernantes y autoridades alertó al gobierno central. Es cierto que tanto nuestros representantes en el parlamento, la alcaldesa y el presidente de la región Cusco se expresaron en tono de “lucha” en la sala de conferencias del congreso luego de abandonar la reunión para la derogación de la ley, de la cual salieron perdiendo la votación, pero no es para menos debido a que esta ley no tiene sentido y atenta contra el Cusco. Por lo tanto, como dijo la congresista cusqueña Sumire, mi opinión la comparto con ella: “Si Bruce quiere vender, que venda a su madre”.
Pero en fin, no es la primera vez que el gobierno central es injusto con el interior del país. No pueden esperar que el Cusco se quede quieto mientras lo golpean ¿no? Como decía, en este momento, en la capital histórica del Perú encuentras policías en la puerta de los mercados, debido al paro de mercados; en el aeropuerto, debido a la advertencia de nuestras autoridades; en la estación de San Pedro y en Machu Picchu, también debido a las advertencias; y, por último, en rondas por toda la ciudad, por precaución.
“Habrá huelga” fue la frase de Hugo Gonzáles al salir del congreso. Dicho y hecho, hoy fue día de huelga y de paro “seco”. Sabía que era paro, pero paro ”seco”, obviamente que no. Muchos dijeron que iban a cerrar el agua, pero luego escuché que para nosotros paro “seco” era paro total, recogí la noticia con una sonrisa en la cara, pero bueno, estos días he estado de profesor de matemática y tenía que cumplir mi deber. Así que tomé mi bicicleta y me puse en marcha. No les mentiré, es primera vez que salgo en un paro y mucho más en un paro “seco”, solamente por el temor de mis padres. Ya en ruta, me sorprendió ver un par de carros pasando en un paro “seco”, pero al fin y al cabo, los manifestantes les silbaban y los amenazaban con piedras, las calles tenían “piquetes” y muchos caminaban o jugaban fútbol en plena pista; por otro lado, también se observaban muchas bicicletas. Además, los policías no faltaron.
Ya dando mis clases de matemática se escucharon ambulancias pasando y, luego del rico almuerzo que me invitaron en casa de una alumna, escuché por la radio, con una cara de seriedad, que, por precaución, cerraron indefinidamente el aeropuerto del Cusco, suspendiendo catorce vuelos provenientes de Lima y, además, habían detenido a unos seis estudiantes tratando de entrar al aeropuerto Alejandro Velasco Astete por una pared en la vía expresa. Y pensé para mí, los policías ¿tenían que hacer algo?, pues lo lograron.
Ya por la tarde, fue increíble la velocidad con la que volé a mi casa debido a una lluvia que se aproximaba. Llegué con la lluvia en mis talones, o mejor dicho, en la llanta trasera de mi bicicleta a descansar en mi casa. Supongo que con la lluvia se terminaron por ir los manifestantes a sus casas y con eso terminó el primer día de paro en esta ciudad imperial, olvide mencionar que el paro debería durar 48 horas según decretaron.
El Cusco parece ser un caos en este momento. Para muchos la vida sigue como siempre y son indiferentes, otros participan activamente del paro, pero en el fondo todos están enterados de los acontecimientos. El gobierno esta alerta con los ojos puestos en lo que pase en el Cusco, han amenazado con quitarnos el derecho a ser sede de la “V Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de América Latina y el Caribe - Unión Europea a realizarse en mayo y, además, del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico – APEC a realizarse en noviembre en nuestro país. Cusco es el punto más importante del Turismo en el Perú, Machu Picchu es el más importante monumento del Perú, hace poco elegido como maravilla del mundo, así que si no vienen los presidentes los que salen perdiendo son ellos.
Bienvenidos son ellos para mostrarles los terrenos donde quieren construir hoteles y restaurantes, absurdamente. Así que, señor presidente, consejo de ministros y parlamentarios limeños si no quieren huelgas, no nos provoquen con leyes absurdas y abusivas. Cabe resaltar, que el gobierno central nos tiene un miedo increíble como si fuéramos bárbaros, esto se demuestra en el despliegue policial ocurrido últimamente. Hasta James Bond, el famoso agente británico “007” con “licencia para matar”, nos tiene miedo al dar una advertencia para cancelar el rodaje de una parte de su última película en el Cusco. Por esto y todo lo ocurrido hasta ahora, salgo a la calle y grito en voz alta, como buen cusqueño que soy: “¡El Cusco no se vende, el Cusco se defiende…!”.
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